domingo, 17 de junio de 2012

A MI PADRE

La luminaria de mis días
Se va extinguiendo.
El tiempo es cruel
Y lo abraza todo.

El otoño de la vida ha cubierto,
de nieve, su cabello.
El paso de los años
ha surcado  su piel.
Pero, su intelecto está intacto,
su integridad  humana.
su ejemplo de hombre de bien
sigue latente:
Siempre justo, siempre comprensivo.

Esta perfección que emulo hoy,
Es la fuente de  mi vida,
Es el guía que conduce mi existencia:
Es mi padre, mi líder, mi maestro...

Gracias, papá,
 Gracias por hacer de mí, lo que, hoy, soy.
Gracias, por esta  herencia
Que me has legado,
Gracias, papá…

 ¡Feliz Día, querido padre!
¡Feliz día, hermanos,
tíos, primos  y  amigos
que comparten la dicha de ser padres!